las vegas de matute: un pueblo señorial

Sin verse influenciados por ningún taller importante de la época, desde el norte de España, vinieron, allá por el siglo XV, varios maestros canteros con gran habilidad en tallar la roca. Estos canteros impusieron la sobriedad y monumentalidad en sus construcciones, y a lo largo de los siglos XV y XVI dejaron su sello en el centro de la Península. El más representativo de estos canteros es Rodrigo Gil de Hontañón, maestro en la catedral de Salamanca y Segovia, era muy conocido en su época.

Este famoso maestro cantero es el artífice de la Iglesia de Santo Tomás de Canterbury en Las Vegas de Matute. Contar con los servicios de Gil de Hontañón fue una petición de Pedro de Segovia, XI señor de Las Vegas. El linaje de los Segovia comienza a finales del siglo XIII, cuando el rey Sancho IV “el bravo” cede una torre y casa fuerte a Gómez Rodríguez por su ayuda en la defensa de su corona. De mediados del siglo XIII son las primeras referencias a Las Vegas que constituía una población diferente de Matute, un despoblado situado al noreste del actual pueblo de Las Vegas. De la unión del nombre de ambos núcleos nace el actual nombre del pueblo: Las Vegas de Matute.

De la antigua aldea de Matute solo queda su ermita, desde la que el primer fin de semana de septiembre es trasladada la patrona de la villa, la virgen de Matute, hasta la iglesia de Santo Tomás, dando comienzo a la fiesta grande del municipio.

Frente de la torre de los Segovia en Las Vegas